El pasado 14 de julio el COAG Energy Council aprobó en Brisbane llevar a cabo 49 de las 50 recomendaciones sobre abastecimiento energético a nivel nacional presentadas al consejo hace unas semanas. Estas fueron planteadas como respuesta al informe final sobre el mercado energético australiano elaborado por el Dr. Alan Finkel.
Entre las principales recomendaciones acordadas por el Ministerio de Medio Ambiente y Energía, destaca la introducción de nuevas obligaciones para las empresas generadoras de energía que deben garantizar antes de entrar en el mercado un determinado nivel de capacidad gestionable (o de reserva) para asegurar el abastecimiento ante cualquier emergencia. Para garantizar la seguridad energética, también se exigirán a los operadores de red y a los generadores nuevos requisitos, tales como un nivel mínimo de inercia que asegure sistemas de trasmisión capaces de hacer frente a cambios repentinos en el mercado o una capacidad de respuesta rápida ante los mismos.
Por otro lado, se ha introducido una cláusula para los grandes generadores de energía por la que se les obligaría a anunciar su cierre con al menos tres años de antelación. Se creará, además, un Consejo de Seguridad Energética como órgano supervisor del estado, la fiabilidad y la seguridad del mercado nacional eléctrico, y asesor en materia de prioridades estratégicas para mejorar la planificación a largo plazo.
Finalmente, se ha aprobado el denominado Gas Acceleration Program, un programa de 26 millones de dólares australianos (más de 17 millones de euros), para incentivar la inversión de proyectos que aporten nuevas fuentes de gas en la costa este del país en los próximos tres años. Con este programa, se ofrecerán hasta 6 millones de dólares (4 millones de euros) para cada proyecto nuevo de generación de gas.
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